Si el
Nexus S es básicamente un
Galaxy S con un baño de
Gingerbread, uno podría pensar que la actualización de éste último a la nueva versión de
Android sería una cuestión de tiempo. Pues Samsung no lo tiene tan claro. En unas declaraciones realizadas por un representante de la firma coreana, se reconoce que "Samsung evaluará la posibilidad de incorporar la nueva versión [en referencia a Gingerbread] en sus productos".
El empleado de Samsung continúa afirmando que dicha decisión dependerá de "varios factores", pero alude sobre todo a "los requerimientos del sistema". En este sentido, Google afirma que el hardware necesario para mover con alegría Giingerbread es el mismo que Froyo, con lo que no debería haber mayor problema. La pelota está en el tejado de Samsung.
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